1º Parte: ESTUDIAR INGLÉS EN MALTA por Anna Calvete
El día 2 de octubre volé a Malta desde Barcelona vía Roma. El viaje no fue muy largo, parece mentira que esa isla en medio del Mediterráneo esté a tan solo 2 horas de Barcelona con un vuelo directo.
Iba a encontrarme con el personal de la escuela de inglés con la que trabajamos y con otros agentes de otros países, para conocer las instalaciones de los diferentes centros que tienen y las residencias donde se alojan los estudiantes.
La primera impresión de lo que vi es la de estar en un sitio diferente, la construcción de los edificios recuerda a Marruecos, parece que algunos están sin acabar. Los muros están compuestos de grandes bloques de piedra caliza, al principio uno puede pensar que no es bonito, que les falta una mano de pintura, pero te acabas acostumbrando y encontrándolo pintoresco.
El clima en octubre es suave, pero los días que estuvimos en Malta hizo mucho calor, las playas estaban llenas y aún quedaban muchos turistas disfrutando de sus vacaciones. Nos alojamos en el Hotel Diplomat, el cual acoge estudiantes internacionales en verano.
El personal es muy atento y, aunque las habitaciones no son muy grandes, está en el paseo marítimo de Sliema, la población donde se encuentra nuestra escuela.
Si coges el mapa de la isla, se ven innumerables nombres de lugares, así que puede dar la sensación que te encuentras en un sitio grande, pero todo está unido, ir de Sliema a Gzira puede costar 5 minutos andando, o para ir a Valletta, se puede coger un ferry y plantarse en la capital en 10 minutos.
El día que llegamos fuimos a la isla de Gozo para ver una de las escuelas. Después fuimos a Comino, la tercera isla del archipiélago, en la que se rodó la película de “El Conde de Montecristo”, y que es famosa por sus grutas y el color esmeralda de sus aguas. En Comino tan solo hay un habitante y un hotel. La isla de Gozo es muy tranquila y es ideal para realizar cursos de submarinismo.
Iba a encontrarme con el personal de la escuela de inglés con la que trabajamos y con otros agentes de otros países, para conocer las instalaciones de los diferentes centros que tienen y las residencias donde se alojan los estudiantes.
La primera impresión de lo que vi es la de estar en un sitio diferente, la construcción de los edificios recuerda a Marruecos, parece que algunos están sin acabar. Los muros están compuestos de grandes bloques de piedra caliza, al principio uno puede pensar que no es bonito, que les falta una mano de pintura, pero te acabas acostumbrando y encontrándolo pintoresco.
El clima en octubre es suave, pero los días que estuvimos en Malta hizo mucho calor, las playas estaban llenas y aún quedaban muchos turistas disfrutando de sus vacaciones. Nos alojamos en el Hotel Diplomat, el cual acoge estudiantes internacionales en verano.
El personal es muy atento y, aunque las habitaciones no son muy grandes, está en el paseo marítimo de Sliema, la población donde se encuentra nuestra escuela.
Si coges el mapa de la isla, se ven innumerables nombres de lugares, así que puede dar la sensación que te encuentras en un sitio grande, pero todo está unido, ir de Sliema a Gzira puede costar 5 minutos andando, o para ir a Valletta, se puede coger un ferry y plantarse en la capital en 10 minutos.
El día que llegamos fuimos a la isla de Gozo para ver una de las escuelas. Después fuimos a Comino, la tercera isla del archipiélago, en la que se rodó la película de “El Conde de Montecristo”, y que es famosa por sus grutas y el color esmeralda de sus aguas. En Comino tan solo hay un habitante y un hotel. La isla de Gozo es muy tranquila y es ideal para realizar cursos de submarinismo.
Victoria, Capital de Gozo. Vista desde su Ciudadela
Vista de Comino desde la Isla de Gozo
Anna Calvete
Consultora NewLink
Consultora NewLink
Llevar a cabo la capacitación de inglés en el extranjero me parece la forma más efectiva de aprender el idioma. No obstante, con la gran crisis económica existente no me parece una opción muy viable.
Posted by curso ingles | 3:20 p. m., julio 07, 2010